Aprendizaje

13.10.2012 18:59

Aprendizaje

Dicen por ahí, que la experiencia no te la quita nadie, como si se tratara de el bien más valioso e inalcanzable, humildemente, pienso que es el aprendizaje lo que nadie debiera quitarnos, incluído el que las experiencias dejan.

Existen maestros o profesores, porque hay alumnos que aprenden, asimilan, incorporan y practican. Si bien la vida misma es maestra (o debería serlo) me refiero en este caso a lo académico- laboral.

Tuve una corta enseñanza gastronómica respecto a otras personas, pero hay dos cosas importantísimas que aquellos años me dejaron como aprendizaje:

 

El valor de la Motivacn: Yo venía saliendo de uno de esos golpes duros que te da la vida, viviendo en una ciudad nueva, de pocos amigos y sumado a ésto, muchos años alejada del estudio. Así me encontraba ese primer día de clases, sentada frente a un pizarrón que anunciaba “ Métodos de cocción”..............creo que en el silencio reinante de aquel salón, todos hubiéramos preferido leer “Bifecitos a la criolla” esperando que nos pasen la receta y ¡manos a la obra!.Sin embargo, lo anunciado se cumplió, el profesor dio su clase teórica y poco tiempo pasamos en la cocina; además de esto, antes de retirarnos se escuchó: “...para la próxima repasen lo que vimos hoy y lean la unidad que sigue..”

Repasar y leer; la suma era igual a estudiar, a volver a casa y destinarle un tiempo al saber. Me sentí motivada en medio del desánimo interior que vivía; la cosa no era simplemente ir a cocinar, a seguir los pasos de una receta, debía involucrarme, preguntar, conocer, estudiar, practicar...Aprender.

Aquel profesor despertó mi interés por la cocina, me movilizó cada clase a no conformarme: “Un día van a estar haciendo cola para que les den trabajo y tal vez, quedar seleccionado dependerá de un dato, una explicación técnica, una historia detrás del ingrediente que ustedes puedan dar y el otro no....” difícil olvidarme sus palabras.

Claro, de aquel salón de clases repleto de gente que pretendía ser chef (movidos por la “moda” quizá), sólo quedaron unos pocos.

 

El trabajo en equipo, La Práctica y Los Detalles: A medida pasaron las clases me encontré con algunas piedras en el camino, la más grande quizá fue: “Esto no me sale....no me quedó bien...me demoro muchísimo”; ante esto podía quedarme estancada o hacer un esfuerzo más y avanzar.

Durante el primer año de estudio, se llevó a cabo un concurso interfilial en la ciudad de Rosario, del cual tuve el privilegio de participar junto a dos compañeros más.

Trabajar en equipo no fue fácil, una cosa es estar juntos cocinando en el mismo espacio, como suele suceder en la cocina de un instituto gastronómico y otra muy distinta es trabajar en equipo, donde el roce te va puliendo, la presión te pone al límite y de tu buen desempeño depende el de tu compañero  y el éxito (o no) del trabajo final, todo quedará plasmado en el plato terminado. Entendí que el tiempo vale oro, que es indispensable el orden, aprovechar bien el espacio, mantener la limpieza, leerle el pensamiento a tu compañero, interpretar una mirada de auxilio...y llorar de emoción por haberlo logrado, por haber cumplido la misión aunque no haya premio visible.


Para aquella ocasión, nuestro profesor (“entrenador” en aquel momento), había diseñado la parte crocante del postre en base a una masa de tulipa tradicional pero con forma no tradicional! La tarea cayó en mis manos y era necesario simular una ramita soplada por el viento......levemente inclinada hacia la derecha, finita......pero que no se quebrara, delicada.....pero sin demoras....no pude hacerlo ni la primera, ni la décima vez, y cuando estuve a punto de renunciar ante mi torpeza, escuché: “Esta tarde, cuando vuelvas a tu casa, agarrás papel de diario, te comprás la mayonesa más barata para no desperdiciar masa y te ponés a practicar hasta que te salga”....Fue mucho papel de diario y mayonesa....pero lo logré; conseguí el Detalle de esa ramita crocante.

Hoy me esmero por seguir aprendiendo y por hacer cada trabajo de la mejor manera posible, creo en la motivación, el trabajo en equipo, la práctica, el estudio, la lectura y los detalles......porque todo esto, hace la diferencia. 

 

Paula Laztra - Cocinera Profesional